domingo, 26 de febrero de 2012

*ExtrA*


La murga andante: Como ya lo ha nombrado, esto es una murga, pero no una cualquiera, esta es especial. En simples palabras, las murgas son callejeras, por ende nacen de la calles, en su mayoría lo integran personas de clase baja, y chicos que salen de la droga y alcoholismo. La llamamos así ya que siempre vamos de un lugar a otro, no nos quedamos quieto en un lugar somos bien sedentarios. Nuestro traje en de color azul llamativo, y en su reverso tiene una el símbolo de anti-droga y a su alrededor una rosas negras, que cada una de ellas representa a nuestros queridos muertos por las drogas.
Somos alrededor de 45 personas que hacemos esta pequeña comunidad. Esto se inicio hace unos 2 años por idea de una mujer que quiso ayudar a chicos con problemas de adicción y a los de baja clase, así empezó de apoco, junto un pequeño grupo, al principio fue difícil, pero después se estabilizaron y conformaron una grupo, como una familia y así mas gente los apoyo y cada vez fueron mas.
Bombos, panderetas, sombreros, silbatos y de mas cosas eran indispensable para ellos, y con ellos recorrían gran parte del estado con su música. Pero algo terrible paso, hacia ya unos meses la mujer que formo e hizo posible todo esto falleció por culpa de un terrible accidente automovilismo. Los chicos no sabían que hacer, estaban mas que desorientados, y así volvieron a caer en la droga. Ellos necesitaban a alguien que los apoyase, ya que se estaban desintegrando y se echaba a perder unas de las mejores murgas del país, por que si lo eran, ellos habían superado sus problemas y se dedicaron solo a ello.
Un día apareció la solución para este problema. Un hombre llamado Patrik de unos 33 años de edad, decidió convocar nuevamente esta murga para hacerla otra vez vivir. Pero sus intenciones no eran las mejores. El volvió a abrir el viejo lugar donde practicaban y así todo volvió a su normalidad pero con un cambio, Ahora no solo repartirían su música si no también la droga.
Como sabemos la murga eran para alejar a los chicos de las adicciones, pero este hombre los volvió a meter en aquel vicio. Pensó que gracias a ellos podía hacer todo un trafico, y no solo de droga, si no también de armas y de personas. El hombre, cuyo pensamiento no era el mejor, llevo a cabo su plan con gran éxito y no solo eso, si no que. Los chicos estaban de su lado, aunque un sus trajes tenían el logo del anti-droga y las rosas que identificaban a los muertos por ellas, ya no tenían ningún significado, era solo un adorno.
Gerard y Mikey Way eran integrantes de aquella murga desde de sus principios. Todo comenzó cuando el primero desde dejar las drogas por su bien, después se entera de la existencia de esta murga que su abuela Elena decidió formar para chicos como el por ende el se unen a ellos y junto a el su hermano menor. Después de aquella perdida terrible para todos, en especial para los hermanos Way, nuevamente el se metió con la droga y se alejo del mundo exterior. Tuvo varios intentos de suicidios, que por suerte fueron impedidos. Al poco tiempo su hermano le comunica que la murga abriría las puertas nuevamente pero con otro director. Al principio no estaba de acuerdo con las ideas del nuevo director, ya que la murga se ideo para sacar a los chicos de las drogas y no para meterlos. Pero después el accedió junto a su hermanos, ya que en realidad antes no hacían nada mas que estar en ello. Y ahora además de pertenecer nuevamente, eran la mano derecha del director, por ende se encargaban de todos los problemas, de todos aquellos que se entrometían.
Y si nuevamente hace un mes la murga andante era mas que una murga, eran un “mafia” a escondidas ya que la murga era solo una excusa para que nadie pudiera sospechar. 

viernes, 24 de febrero de 2012

Capitulo 4 : ¿Para donde mirar?


- Vamos Gerard es solo un niño – musito a su lado
- Espera, dale su tiempo – contesto
- No tenemos tiempo - dijo un tanto desesperado – No lo va a lograr
- No tiene otra alternativa - desvió su mirada al menor

Y era verdad, yo no tenía otra alternativa. Gerard me había propuesto uno de sus “trabajitos” a cambio de droga y el cuidado de mi hermana, pero nunca pensé que esto terminaría con una vida.

Gerard después de aquella conversación, salimos de la casa y me trajo hasta un casa cerca de la mia donde buscamos un tipo mas, que según lo que escuche era su hermano, era un tipo alto y flaco. Fuimos todo el trayecto callado, íbamos en un auto medianamente nuevo de color azul oscuro que sacamos del garaje de la casa, que por cierto era muy bonita, solo que nunca me había dado cuento de su existencia. Yo iba en el asiento de atrás mirando por la ventana como se reflejaba el paisaje nublado de la ciudad. Jugaba con mis manos con la cabeza agachada mientras por ello pasaba miles de ideas sobre el trabajo que me esperaba. Había dejado a Emily durmiendo con Ray, pensaba volver antes de que despertaran al igual que mi hermana no quería que ninguno de ellos sospecharan de mi ausencia.
Mis manos empezaron a sudar, estaba nervioso, el camino se hizo un tanto largo o por lo menos para mi que iba contando los segundos nerviosamente. Al llegar, me encontré parado al frente de un gran galpón sobre una solitaria calle. No me estaba gustando nada esto. El rubio se bajo del auto y abrió aquel portón color verde oscuro que a penas se notaba ya que de pintura le quedaba poco. Una vez abierto del todo subió nuevamente al auto, Gerard arranco y estaciono el auto allí adentro. Ambos se salieron del auto y yo los imite. Pude ver con claridad aquel lugar. Estaba muy maltratado, era mucho mas grande de lo que parecía verse de afuera, tenia telarañas por todas partes, la mayor parte estaba vacía y en algunos rincones se podía ver chatarra descompuesta. Estaba húmedo, y cada instante refrescaba mas y para mi mala suerte no había traído ningún abrigo. El piso tenia algunos charcos de agua, seguramente había entrado por la lluvia en algún agujero del enorme techo, y si que lo era. Después de dar mi mirada rápida en aquel lugar desconocido, Gerard se acerco a mi prendiendo fuego su cigarro.
- Lo primero que tienes que nunca tienes que decirle a nadie que estuviste aquí – dijo inhalando – y segundo ¿has usado alguna vez un arma? – pregunto
Si, pero nunca he gatillado. Sabia como usarla pero siempre, cada vez que salía a robar llevaba una que tenia guardada en mi habitación, pero nunca le he herido a alguien, era solo para defensa, solo robaba, no era un asesino. Era cuestión de principios, Addie me acompañaba, e insistía a que siempre llevase una conmigo una conmigo por protección, por lo que compre una en el trafico de armas, era una calibre 38, la tenia oculta en una caja de metal debajo de mi cama, ni Eliza ni sus hijas podían de saber de su existencia, Eliza sospecharía de mi, de la poca inocencia que me quedaba.
Asistí con la cabeza, no había dicho ni una palabra desde que salimos de mi casa, pero era mejor asi, esto me estaba tensando, me daba miedo lo que podría pasar alli, además de que podía ser una trampa y deshacerse de mi, al final Gerard si era un tipo peligroso.
El se dio media vuelta y se dirigió a la parte trasera del auto, abrió el baúl de auto y seguido a eso llego su hermano para susurrarle algo en el oído. Se dijeron unas palabras que no pude oír ya que me encontraba en el otro extremo del auto y yo disimuladamente los miraba. Después vi como los dos intentaban a la vez saca algo de allí, se veía bastante pesado, lo trajeron hasta a donde estaba yo y lo tiraron allí. Se trataba de una bolsa grande de color marrón claro, era la típica bolsa donde llegaban las cartas al correo, solo que en esta no había cartas, algo respiraba allí adentro.
Tenia mis ojos bien abierto, estaba sorprendido, no podía articular ninguna palabra, ni un solo movimiento. La respiración empezó hacer agitada, era como si de pronto me agarraría un ataque de asma. Trague saliva y me dispuse hablar, separe unos milímetros mis labios y antes de que pudiera un salir una palabra, Gerard tomo de un extremo aquella bolsa y saco una navaja de su cintura y con ella rompió un extremo. Vi como de ella sobre salía una cabeza, cuando Gerard se alejo pude ver con claridad que había un tipo adentro de esa bolsa. Se le veía todo en sangrentado, tenia grandes cortes sobre su rostro. Nunca lo había visto en mi vida, no sabia quien era. Aparentaba de unos 30 años, tenia pelo oscuro al igual que se piel. Sus lagrimas caían de los ojos en silencio, no se movió en ningún momento, se le notaba su miedo, se escondía atrás de su pelo y sus lagrimas.
Gerard y su hermano pasaron por al lado mío, el rubio se poso a unos metros atrás de mi, mientras Gerard se quedo a mi lado. Yo no lo mire, no podía de dejar de ver ese tipo, quería ayudarlo, pero no sabia como. El se fue nuevamente hasta el auto. Sus pasos sonaban demasiado fuerte por el eco, al igual que cuando cerro la puerta del auto. Tome coraje y vi desde mi altura como Gerard desde el auto disparaba con un arma a aquella bolsa. La bala impacto directo a la altura de la pierna de aquel hombre. El grito de dolor y se retorció lo mas que pudo. Yo pegue un pequeño salto desde el lugar que estaba, solo pude hacer aquel movimiento estúpido. Gerard se empezó a reír a carcajadas con su arma en mano, su hermano solo lo miraba seriamente.
- Viste Mikey, cada día tengo mejor puntería – dijo entre risas dirigiéndose a su hermano
- Aun esta vivo – respondió
- Pero no por mucho tiempo mas – aun seguía tentado de la risa
Yo agache mi cabeza, quería evitarlo todo este tiempo, pero me había caído la ficha, y sabia perfectamente cual era mi trabajo, pude haberlo sospechado desde que me lo propuso sabiendo que clase de persona era Gerard Way, estaba avisado. Quería salir corriendo de allí, quería volver a mi casa con mi familia. Como lo había dicho anteriormente yo no era un asesino, no, no lo era, y no quería hacerlo.
Gerard se acerco a mi con al arma en la mano, la coloco a la altura de mis ojos para poder verla bien. El sonrió al ver mi cara, seguramente estaba blanco como una hoja. No podía ser, ¿yo Frank Iero tengo miedo? No podía ser, yo nunca era de tener miedo a nada, todo lo contrario. Me pare con firmeza y lo vi directo a los ojos. Poso una de sus manos sobe mi hombro derecho y con su mano izquierda puso el arma sobre mi pecho. Lo tome con mis manos, le di un vistazo, ya estaba cargada con 2 balas, y sin el seguro. Me soltó y se alejo unos milímetros de mi y se dispuso a hablarme.
- Veremos de que estas hecho Iero - me susurro – no tienes muchas alternativas, piensa en tu hermana, en el dinero y en la droga
Cerré mis ojos un instante y lo vi todo claramente, si me deshacía solo de este hombre lo tendría todo, dinero, droga, seguridad y por que no unas cuantas mujeres. Hice una mueca con mis labios. Esto iba mas alla de mis principios.
- No puedo hacerlo – dije seriamente
- ¿Por qué no? - alzo su ceja
- No puedo, no quiero, no soy un asesino –
- No hay escapatoria de esta Iero – me tomo de los hombros y me giro hacia la bolsa
El se alejo de mi y se poso al lado de su hermano, que por cierto solo fumaba y admiraba aquella escena. Gerard prendió un cigarro e imito a su hermano. Por otra parte mire al hombre metido en aquella bolsa, vi como aun seguía llorando en silencio, me partía el alma verlo así. Levante el arma con ambas manos directo a la cabeza de aquel tipo decidido a disparar.
¿Tendría familia? ¿Por qué tengo que matarlo? ¿Cuál fue el error para pagarlo con su vida? Estas y miles de preguntas mas se me cruzaban por la cabeza. ¿Habría alguien que llorar por su muerte? Me imaginabas pequeñas criaturas llorando junto a una mujer ¿a quien le estaba quitando la vida?
¿Cómo se llamaría? ¿Le gustaría la música? No sabia nada. ¿Podría ser mi padre? Podría, pero no lo creía tan así. Mierda estaba tardando mucho, las manos me sedaban, mi cabeza no se podía concentrar.
Oi a los hermanos hablar, Mikey le estaba reclamando algo sobre mi, lo único que escuche de parte de Gerard era que no tenia otra alternativa. Acomode mejor mi postura, estaba listo para dispara, pero no podía, veía ese tipo llorar y no podía. Mierda en verdad estaba aterrado, y yo lo hacia sufrir mas con mi indecisión. Seguramente si no lo mataba yo el, ellos me matarían a mi también.
Sentí los pasos de Gerard avanzar así a mi. Tenia su respiración muy cerca mío, el estaba pegado a mi cuerpo. Sentí su brazo pasar su brazo por mi alrededor de mi cintura. ¿Qué estaba haciendo? No lo sabia con exactitud pero debo confesar que me calmo un poco y deje de temblar.
- hazlo de una vez Iero – me susurro en el oído
Sentí su bulto pegado a mi y sus labios en mi cuello. Me relajo mucho mas, estaba entre sus brazos.
- Lo hare – lo dije mas para mi que para el
Note como el sonrió desde atrás mío. Acomode un poco mi puntería y cerré mis ojos y deje que el momento fluya.
El disparo se escucho en todo el galpón, tuvo un gran eco. Abrí mis ojos y me encontré con el cuerpo sin vida del hombre. Su rostro era irreconocible, estaba mas ensangrentado de lo que estaba. Gerard de posito un pequeño beso en mi cuello. En ningún momento me soltó, se quedo conmigo allí. Su hermano se acerco al lado nuestro. Tomo la bolsa y la cerro con el cuerpo sin vida. Lo arrastro hasta el auto y lo puso nuevamente en su lugar de llegada. Yo respiraba un tanto agitado. No podía creer lo que cavaba de hacer, yo no era un asesino pero ahora si lo era, acababa de matar un hombre, alguien que tenia una vida por vivir, que aun que allá cometido dichos errores que no conozco merecía vivir.
Gerard volvió a prender un cigarro ya que el anterior lo había apagado para acercarse a mi. Como aun seguía con las manos arriba con el arma, el con ambas manos las bajo lentamente, creo que aun seguía en un estado de shok. Me quito el arma y lo guardo en su cintura cual estaba pegada a mi.
- Bienvenido – susurro nuevamente en mi oído, pero esta vez fue con un tono mas de dulzura, algo de extrañar en un hombre tan frio como el – a la murga andante

***
Se que es muy corto, lo lamento, pero es que con esto de las vacaciones no tuve tiempo, me la pase de joda. si uieren que los siga etiquetando con un like alcanza para estar en el siguiente cap, si no, dingame y no los etiueto Espero que lo poco que publique les gusta. Este cap lo saque de una escena de una película que nunca supe como se llama pero es genial. si pueden difundir la fic se los agradeceria. grax por leer!

xoxo

martes, 14 de febrero de 2012

Capitulo 3: ¿El enemigo en casa?


Capitulo 3: ¿El enemigo en casa?

- 1, 2,3… despejen – dijeron a dúo
- No despierta –  musito tomando el pulso de su corazón
- Una vez mas – dijo preparando sus manos – 1,2,3… despejen
- No funciona – su tristeza era evidente
- Yo ya me aburrí de jugar con el muerto – musito enojada
- Vamos, va hacer nuestro juguetes por unos minutos – dijo animada
Juliet tenia razón, pero no tenia ganas de sacarla de allí, se veía muy divertidas jugando con el, aun que aun no se sabia si en verdad estaba muerto o inconsciente. Como pueden notar me había quedado a cargo de aquel “muerto” junto con mis sobrinas y como ellas estaban aburridas se pusieron a jugar a las enfermeras con el. Yo mientras las veía desde la otra cama intentando dormir, algo que no estaba consiguiendo gracias a sus gritos.
Hacia mas de 5 horas desde que le había pegado en la calle y aun no despertaba, dudaba que estuviera vivo, no mostraba síntomas de alguien con vida, cada vez estaba mas blanco, y yo dejando a mis sobrinas jugar con un cadáver.
- Tienes razón, aun no se si esta muerto – creo que fui demasiado sincero
- El no esta muerto – grito la pequeña
Rodee mis ojos y me levante con toda la pereza del mundo. Me dirigí hasta la cocina y busque un vaso al cual lo llene de agua fría helada y me encamine nuevamente para la habitación.
- Córranse, vamos a ver si el muerto se levanta – dije mientras me ponía al frente del tipo y mis sobrinas se alejaban de el
Acto seguido empine el vaso y deje caer el agua helada sobre su rostro. El se despertó desesperadamente y maldiciente  los 4 vientos, mientras nosotros solo nos reíamos a carcajadas. Después de eso nos miro con desconcierto y enojo a la vez, pues estaba totalmente mojado caían sus mechones negros sobre su cara dejando atrás sus ojos verdes. El se sentó mas cómodamente en la cama se escurrió un poco el pelo y la ropa y luego me volvió a mirar.
- ¿Quiénes son? – pregunto enojado, pues eso me hizo reír mas
- Yo soy el hermano de la chica con quien te acuesta todas las noches – Dije aun riendo, de verdad me había tentado
- ¿Charlotte? – pregunto
Negué
- ¿Ramona? – volvió a preguntar
Y nuevamente Negué
- ¿Katty? –  se le veía impaciente
- No, no es ninguna de ellas dos – dije en poco indignado, este tipo si que se acostaba con todas las minas que quería, yo era niño al lado de el – Eliza
-¡Eliza! – Exclamo - ¿Dónde esta ella? ¿Y como llegue aquí? – musito tocándose la frente en forma de sufrimiento
- Ella esta con otra cliente ahora – dije con una mueca rara en mis labios, como he dicho hay veces que me duele decirlo – Y tu llegas aquí por que me te vi tirado en la calle y me diste pena y te traje hacia adentro – no podía decirle que el había intentado abusar de mi y yo me defendí  con un golpe, no delante de mis sobrinas
- Me duele mucho la cabeza y el estomago – dijo retorciéndose de dolor – ¿En donde esta el baño?
- La primera puerta en el pasillo – dije apoyándome en la pared junto a las pequeñas
El salió corriendo de la cama a toda velocidad, un poco mas y me llevaba puesto. Mientras tome a la mas pequeña y la recosté sobre su cama para que pueda descansar ya que era demasiado tarde, al igual que su hermana, también gruño cuando la obligue a dormir, pero después de un rato se durmieron. Me fui de la habitación y me dirigí hacia el baño para ver cómo se encontraba el “extraño”. Escuche desde el otro lado de la puerta que seguía con resaca, y que tenia un rato mas allí adentro, por lo que lo deje solo y me fui a comer algo de la heladera. Tome unas latas de cervezas y mire tele en el sillón hasta que alguien entro por la puerta haciéndome pegar un pequeño salto de susto
- Que raro tu por estas horas – Dije girando mi cabeza hacia donde se encontraba mi amigo
- Me echaron de la ocupa  - dijo con preocupación arrebatándome una cerveza y sentándose junto a mi
- Y yo que pensaba ir a vivir allá con vos – musite pegando mi vista en el televisor, aun que no había nada interesante en ella – No es el fin del mundo Ray
- No, pero me tendré que quedar unos días en la casa de mis padre y no me da gusto – sus padres no eran perfecto, pero el solo les echaba la culpa de todo lo malo
- Te puedes quedar unos días aquí, te hare lugar en mi habitación – gire mi mirada hacia el
- Gracias amigo, pero no quiero traerte problema – contesto
- Sabes que no, solo tendré que conseguir una cama extra grande – reímos
Nos quedamos un rato mas charlando y bebiendo cerveza frente a la tele. Recién eran las 3 AM, y ninguno de los dos teníamos sueño y el tiempo se pasa lento, pero se me había olvidado un pequeño detalle, detalle que se encontraba en el baño, no me había percatado de eso hasta que se apareció en el umbral del living. El primero que se dio cuenta fue Ray quien me tironeo de mi para verificar aquel extraño en la casa. Lo mire unos segundos, estaba igual de blanco, al parecer era ese su color de piel, pero se veía menos dolorido que hoy. No me moví de mi lugar, pero Ray si lo hizo. Mi amigo se acerco a el y lo saludo como siempre lo hacia conmigo, como si lo conociera de toda la vida.
- Nunca pensé que te encontraría acá Gerard – dijo entre abrazos
- Yo tampoco lo esperaba – respondí el otro
- ¿Se conocen? -  pregunte extrañado desde mi lugar
- Si, nos conocimos desde chicos, pero hacia mucho tiempo que no nos veíamos  -me respondió Ray
- ¡Que genial!  - ironice – ahora tu ya te puedes ir de acá – dije seriamente al peli-negro
- No, antes quiero ver a tu hermana – me miro serio y se alejo de Ray para poder verme
- Ella esta trabajando  - dije sacando un cigarro de la cajetilla
- Oh se me olvidaba que la puta trabaja las 24 horas del día – dijo riendo
Yo levante mi mirada y lo mire seriamente, no soportaba que se dirigieran así a mi hermana, era algo que no me toleraba. Me levante de allí y me dirigí a al con la intención de golpearle  y así fue que le golpee en la cara, pero después de esto Ray me detuvo desde los hombros y me empujo hasta acorralarme en la pared. Gerard estaba sangrando la nariz, se paso la mano y me miro directo y se acerco a mi para agredirme pero Raymond lo detuvo con la mano en el pecho y lo llevo hasta el otro extramo y yo no dude en salir de alli pero el me volvió a detener. Y asi el nos detuvo  a cada uno con la mano en el pecho y alentaros para no golpearnos mutuamente.  Los dos estábamos muy enojados y se notaba en nuestras miradas que no se despegaban.
En ese momento entro Eliza junto a Emily por la puerta principal. Las dos corrieron hasta donde estábamos pero Raymond las alejo por las dudas de que alguno de los dos reaccionara mal y podría golpear a unas de ellas por descuido. Por mi parte me aleje de alli y me hacer que a Emily quien se veía preocupada por la situación, al igual que Eliza, solo que ella se acerco a Gerard quien también se alivio al ver que yo no reaccione.
Tome a mi novia de la cintura y la lleve hasta la habitación donde me tire a la cama con las manos debajo de la cabeza y ella se quedo mirándome al lado mío aun parada, y al instante llego Ray quien estaba enojado conmigo.
- ¿Cómo se te ocurre reaccionar así? – Pregunto Ray – Gerard te lleva una cabeza de altura
- Tu sabes que odio que traten así a mi hermana – dije mirando fijamente el techo
- Eliza se lo llevo para su habitación, espero que no vuelvas a repetir esto de hoy – musito mientras se sentaba en el borde de la cama – Me dijo que el  quedaría esta noche acá
- Yo también lo hare – agrego Emily quien se recostó al lado mío – Veo que me necesitas
- Creo que mi casa se volverá un hotel – bromee para romper un poco la incomodidad del momento – Emily dormirás conmigo, y Ray dormirás en el piso
- No hay problema – respondió mi novia
- Lo mismo digo – agrego mi amigo – será solo por una noche
Sin mas nada que decir me levante de mi cama y nos pusimos a ordenar las cosas para poder dormir de una vez, ya que Emily y yo tendremos que ir a la escuela siendo primer día de la semana, y Ray se dedicaría a trabajar y buscar otra ocupa en donde poder quedarse un tiempo allí, espera que lo encuentre, ya que Eliza no nos puede mantener a todos.
Emily estaba un poco caprichosa, tenia un par de antojos. No me querría imaginar como seguirá después. No paraba de dar vueltas en la cama, ella solo quería sexo, pero en verdad yo no quería, estaba Raymond al lado nuestro, aun que estaba profundamente dormida, yo me reusaba.
- Vas hacer un gran padre Frank – dijo una vez quieta en un lugar y mirando fijo el techo
Yo no le conteste, solo me limite a salir de la cama. Me pare y solo con el bóxer Sali de la habitación. Me dirigí hasta la cocina donde busque agua, creo que necesitaba despejarme un poco, pero mi paz fue interrumpida.
- No te duermes enano – dijo a espaldas mía
- No, creo que me agarro el insomnio –
- Ya somos dos – dijo mientras se sentaba en una de las sillas de la mesa de aquel lugar – se que andas metido en la droga
- No de la misma manera que vos – respondí
- Te ofrezco droga y plata a cambio de que me hagas unos “trabajitos” – agrego después de unos instantes de silencio
Me quede unos segundos pensando. ¿Qué quería aquel tipo de mi? ¿En que le haría yo útil? No era alguien que me daba buena espina, pero necesitaba plata, últimamente no estoy saliendo a roba ya que Eliza esta sospechando y Emily esta mas cerca de mi que nunca. Y por otro lado la droga, era solo un placer para mi, pero me gustaba tenerlo. Me di vuelta sobre mis tobillos y lo mire unos segundo. No me había percatado que yo estaba semidesnudo, al igual que el. ¿Qué derecho tenia el de andar desnudo por mi casa? Creo que me lo tenia que tomar con calma, el ahor estaba con mi hermana guste o no, sea de trabajo o no
- ¿Aceptas o no? – insistió
- ¿Qué tipos de trabajo seria?

Hi killjoys: perdón si me demore con este cap es que me he io da vacaciones, y ahora prento me ire otra vez, pero volveré pronto!! Y si puede subiré antes un cap! Muchísima gracias a todos los ue se toman en serio la fic, los que en realidad lo ven. Por otra parte Eliza, no es eliza curt (no me acurdo bn el apellido) pero si quieren suponer que es ella hagandolo. Por otra parte… alguien me puede recomendar un libro para leer? Grax! Por cierto no me he presentado formalmente. Laury l para los que le interesa y muchas grax por leer.

xoxo

miércoles, 8 de febrero de 2012

Capitulo 2: Mi vida... segun yo





Capitulo 2: Mi vida… según yo




La grieta de la ventana dejaba entrar la escasa luz de aquel sol que salía de una nube, esta se enfoco entre medio de mis cejas haciéndome despertar por completo. A lo primero maldije, quería seguir durmiendo por lo menos unos minutos mas, pero después me di cuenta que no estaba solo en aquella cama, y que mi acompañante me miraba fijamente desde atrás de mi espalda. Me di vuelta y me encontré con sus ojos marones mirándome, ella estaba totalmente desnuda al igual que yo, habíamos comenzado ese día con el pie derecho. Ella me sonrió y me di un corto beso en los labios, como se notaba que estaba embarazada, nunca antes había estado conmigo al despertar después de haber tenido una noche de sexo

- Pensé que no despertarías – dijo con un tono juguetón seguida de su risa chillona

- Exageras – fulmine mientras me sentaba en la cama

Ella se apoyo contra mi pecho y me miro desde su posición. Mordió una de tetillas fuertemente, causando que gimiera y me alejara por un instante de ella. Ella rio otra vez, y después me tomo del rostro y me beso, habías veces en la que ella me veía venerable, pero este no seria el caso. En un rápido movimiento de mis piernas, ella se encontraba abajo mío, sorprendida de mi feroz movimiento. Le empecé a morder sus pezones, haciéndola gemir fuertemente, por lo que le tape la boca con una mano. Ella se sentó en seco haciéndome obligar mirándole a los ojos.

- Quiero otra cosa – dijo con una mirada juguetona

- Sabes que no tengo aquí – le reproche

- Pero yo si – chillo mientras se alejaba de mí para buscar algo en su pantalón

Ella saco una bolsita pequeña desde allí, luego volvió a la cama junto a mi, para después acostarse arriba mío. Me miro unos escasos segundos y voltio su mirada a su mano, donde tenia aquella bolsita cuyo contenido era polvo blanco.

- Polvo mágico – dijo divertida hipnotizada mirándolo

- Jimmy esta cerca – dije arrebatándosela

- El esta en la casa del vecino – dijo recuperando su bolsita a la fuerza

- Esta bien, pero no mucho, tu estas embarazada – dije mas serio

Y así fue, ella derramo un poco de coca en mi torso y la alineo con una tarjera de crédito que yo le había robado a una familia que paseaba en las avenidas de la ciudad, entre otras cosas. Aspiraba con un orificio de la nariz, mientras que la otra era tapada con su dedo índice. Después de ella seguí yo, y también aspire arriba de su torso desnudo, al igual que todo su cuerpo. Desde que había probado aquel “polvo mágico” me había vuelto adictivo, hubo un tiempo en que lo deje, pero después de la noticia que me había dado Emily, volví a caer en ella. En la cama aspirado coca con una hermosa chica en mi cama desnuda, estaba en el paraíso, no podía pedir mas, era otra día feliz en mi vida gracias a los efectos de la coca, creo que hasta la aspire en el trasero en Emily al igual que ella en el mío. Me apetecía mucho esto, era el gran efecto de la coca.

Pero después llego la recaída, y eso fue el horro. Dolor de cabeza y resacas. Las pastillas no me estaban haciendo tanto efecto, me sentía vacio, todo echo una mierda con piernas. Me tambaleaba por toda la casa hasta llegar al baño. Realmente me sentía mal, creo que nunca había consumido tanto antes. Pero ella estaba peor, o eso daba a dejar a entender. Y creo que era este el momento en el que reflexione, nos habíamos pasado de largo con la cocaína. Pedía al cielo que el bebe no hubiera sufriera consecuencias graves, en ese instante no me importo si fuera mío o no. Le jale el pelo hacia atrás mientras ella vomitaba en el inodoro. Ya me había acostumbrado verla así, era algo típico de ella verla vomitar, así la conocí, pero eso era otra historia.

Después de un rato salimos del baño ya mas consientes, por suerte aun seguíamos solos, no quería que nadie me viera en ese estado, nadie que me mataría al ver así. Ella se cambio (ambos seguíamos desnudos) sin no antes bañarse ambos juntos, pero solo fue eso.

Una vez ya listos, (ha todo esto ya paso mas de 2 horas desde que empezamos con todo)ella decidió ir se, ya que como ella estaba castigada, se supone que aun seguía en su cuarto encerrada con la música alta. Un ultimo beso en los labios y ella desapareció por la puerta.

- Nos prepara comida tío – dijo una dulce voz rogante desde mis espaldas

Creo haberme olvidado cierto detalle, y es que no solo éramos 4 (incluyendo a George) viviendo en la casa, si no faltaban dos personaje mas, eran las hijas de mi hermana, mis queridas sobrinas, Megan, quien me estaba hablando, ella tenia 5 años y de su familia era solo nosotros, ya que el padre no se hizo responsable al igual que el padre de Juliet, por suerte Eliza se hizo totalmente cargo y yo la apoye en todo y así, pudimos hacernos cargo acosta de todos los problemas.

- ¿Y tío? -pregunto acercándose a mi

- Bueno, pero tu sabes que no es mi especialidad – dije mientras la cargaba en mis brazos y nos dirigíamos a la cocina

Le prepare algo sencillo, como dije anteriormente no era experto. Después apareció Juliet, tenia puesto un pequeño pijama color rosa, fue un regalo de cumpleaños pasado. Ella también tomo su desayuno junto a su hermana en la mesa.

- ¿Y mama? – pregunto la mayor

Ninguna de las dos sabia que su madre era una prostituta, aun eran muy chicas para saber semejante cosa, además de que se desilusionarían de su madre, por eso le dije que ella se dedicaba a cuidar ancianas, y con eso nos manteníamos, había veces que me dolía mentirles

- Vendrá pronto – mentí, la verdad no sabia cuando podía aparecerse por allí, puede que no apareciera hasta al otro día

- ¿Y vendrá con Gerard, verdad? –Agrego Juliet – lo quiero conocer pronto

¿Quién mierda era ese tipo? ¿Cómo mi sobrina sabia de su existencia? Por dios ya me esta empezando a hartar, de seguro Eliza le ha hablado al igual que a mi. Estaba tomando esto seriamente, mi hermana se estaba enamorando de un tipo que solo le pagaba para complacerlo en la cama ¿Cómo alguien se puede enamorar de alguien así? No quería ver a mi hermana sufrir, ya no podría soportar una recaída más. Lo poco que sabia de el, era información que solo lo hacia mas infeliz, tenia que hablar pronto con mi hermana de ese asunto

- No lo se - dije mientras tomaba una cerveza de la nevera

Después de un rato apareció Jimmy, ya para esto eran las 17:29 PM y Eliza no aparecía, no era de extrañar. Hoy era un día de lluvia, por lo que el día estaba bastante aburrido y no sabia que hacer. Las niñas jugaban con sus juguetes y Jimmy se planto en el televisor. Genial, estaba solo y no sabia que hacer. Me dirigí a la pieza y decidí hacer algo mas productivo que fumar cigarros. En el fondo de mi pieza se encontraba mi querida Pansy, era una guitarra eléctrica blanca. Había aprendido un poco de unos de mis mejores amigos, Ray, el me enseño todo lo básico y es por eso que en este momento me encontraba tocando varios acordes, y asi lo hice por varios minutos, hasta que me aburrí y por suerte en ese momento llego mi hermana.

- Al fin llegas ¿no? – le reproche

Ella estaba en la cocina tomando un jugo preparado desde ayer, junto a sus hijas, quienes ahora tenían una gran sonrisa en su rostro.

- Lo lamento Frank, solo que… - explico un poco incomoda

- Ya, ya – dije interrumpiéndola, no quería explicaciones – entiendo

- Bueno – dijo acercándose a mi y saludándome formalmente – ahora tienes que ir a comprar la cena de esta noche

Ella me dio dinero, no teníamos mucho asi que fue poco. Salí de la casa, y me dirigí hacia el pequeño almacén donde compraría la comida, que quedaba a unas 3 cuadras de allí. Mientras, pensaba por que mi hermana se había tardado tanto ese día, y la respuesta me dolía, seguramente había estado con mas de 3 tipos, ese era mi cálculo, y seguramente eran los tres de siempre, ¿o creían que Gerard era el único? Mi hermana tenía mas de 10 clientes.

Compre lasaña, una de mi comida favorita. Al regreso me di cuenta que el lugar estaba peligroso. No pasaba nadie por allí, la escasa luz solo iluminaba la calle y no había ruido alguno. Yo mientras tanto venia jugando con una piedrita por la calle pateándola. Todo venia tranquilo hasta que de pronto se acerca un tipo. Vestida de negro y venia tambaleándose de un lado a otro, yo trate de ignorarlo agachando mi cabeza hasta que paso muy cerca de mí y me jalo de los hombros. Rápidamente intente zafarme de el como pude, pero el era mucho mas fuerte y mas grande que yo e hizo que me arrodillara al frente de el.

- Vamos chúpamela – dijo sacando un arma de fuego desde su cintura y apoyando mi rostro en su miembro

Olía a marihuana, estaba mas que drogado. El me miro desde arriba con sus ojos verdes y una risa malévola. Yo no moví ninguno de mis musculo, el aun tiraba de mi y ponía mi cara junto a su miembro erecto Maldito hijoputa. En un descuido de el me levante con brusquedad y lo empuje haciéndolo caer al piso. El me miro desde el piso y me sonrio.

-Pensé que eras una mujer - dijo riéndose a carcajadas desde el piso – lo digo por el pelo y la estatura – se levanto aun con su ataque de risa

Y no soporte mas, odio que se burlen de mi, por lo que una vez que se puso sobre sus dos pies, lo volví a tirar y callo sobre el piso, pero esta vez quedo inconsciente sobre ella, la fuerza estuvo de mi lado, aun que el ya estaba drogado y eso me facilito.

Aproveche que estaba inconsciente y robe alguna de sus pertenencias una vez terminado ello lo pensé dejarlo nomas tirado en el piso, pero me di cuenta que por la calle del frente mío paso la policía, primero pensé que lo dejaría para que lo encuentren, pero después el podría reconocerme (aun que lo dudo ya que estaba drogado) y demandarme por chorro (igual ya lo era) asi que lo arrastre hasta mi casa, que estaba a solo 5 metros de allí. Lo arrastre hasta casa y lo deje en el living, estaba agotado de tanto arrastrarlo. Ahora podía ver con mas claridad a aquel tipo que quiso que le masturbase. Vi que tenia la piel muy blanca y eso me hizo pensar que estaba muerto, pero me pareció exagerado, no tenia tanta fuerza como para hacer semejante cosa. Al instante llego Eliza, se horrorizo al ver la imagen de aquel tipo tirado en su casa y a su hermano al lado. Corrió junto al cuerpo del inconsciente y se puso a su altura, ella estaba mas que sorprendida y horrorizada, creo que estaba exagerando.

- No te preocupes, ahora mismo ni bien pase la policía lo dejare en el medio de la calle – dije recuperando el aire

- Vamos Gerard reacciona – dijo dándole unas palmaditas a su rostro

- ¡¿Gerard?! –

- ¡Gerard! – grito entusiasmada Megan apareciendo en aquella escena desde el umbral



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Hola!!! grax a todas por leer este cap que me salio re corto y horrible, la vdd no he andado bn animicamente me levanto gritando y ando media depre, pero no voy a contar de mi vida mierdosa! ahora me voy unos dias de viaje asi que no voy a poder subir cap hasta el 14 o mas! espero que les guste este cap! y cualquier preguntan digan si?

miércoles, 1 de febrero de 2012

Capitulo 1: el principio del fin





Capitulo 1: El principio del fin

- Vamos Frankie, levántate - dijo despojándome de aquellas telas tan calentitas que ponían mi cuerpo a temperatura normal
- Déjame en paz - exclame mientras hundía mi rostro en la almohada
- Ya es suficiente enano - dijo con la vos media agitada
Después de aquella frase, sentí un liquido frio recorrer gran parte de mi cuerpo. Sentí como estallaba de risa al lado mío, una risa chillona que era detestable. Me levante desesperante de la cama. Maldita, estaba congelado de frio ahora. Intente agarrarla con mi brazo, pero ella echo a correr, yo intente hacer lo mismo, pero fue en vano, ya que al salir de la cama con el piso mojado, me resbale y caí como un inútil al piso. Su risa sonaba mas fuerte, era realmente odiosa. Ella se fue insultándome por lo inútil que había sido por haberme caído, debía verme muy idiota tirado en el piso todo mojado.
Respire hondo mientras miraba el techo. Mierda, me dolía todo el cuerpo, había caído muy mal de espalda, solo deseaba no haberme roto ningún hueso, George me mataría si me rompo algo. Intente pararme lentamente, me costo mucho pero lo logre levantarme. Camine con cautela hasta la cocina donde allí se encontraba ella fumando un cigarro mientras leía algo, si no me equivoco es una revista. Ella no se di cuenta de mi presencia, por lo que me dirigí hacia la heladera, en la puerta de esta se encontraban los huevo, tome uno, cerré la heladera, y la mire desde su espalda. Sin pensarlo un segundo mas le tire el huevo en la cabeza, por suerte tuve puntería, aun que me dolió un poco por hacer fuerza con el brazo.
- Maldito hijo de puta - grito quitándose lo viscoso del huevo
Era yo esta vez quien reía fuertemente de ella. Ella se veía enfurecida y no era para menos. Salí corriendo de allí, bueno en si lentamente ya que me dolía todos los huesos, y me dirigí otra vez a mi habitación, pero esta vez le eche llave para que ella no pudiera entra.
Me quede solo, tenia toda la ropa mojada, por suerte era solo el pijama. Me puse la ropa, era unos simples jeans agujereados y una remera verde oscura con una franja blanca y unas zapatillas. Me seque un poco el pelo con el pijama y me puse la pulsera de metal que me habían regalado hace unos mese, era simple, no decía nada ni tenia ningún dibujo. Encontré un caramelo en mi bolsillo derecho del pantalón, al parecer mi suerte estaba cambiando.
Salí de la habitación masticando mi caramelo, cuando siento un fuerte golpe en mi mejilla.
- Esto es por el huevo - dijo furiosa
Y otra vez sentí otro impacto igual, solo que en la otra mejilla
- Y esto es por lo que hiciste el sábado por la noche - dijo lanzando fuegos por los ojos
Mis mejillas ardían, ella si sabía pegar fuerte. Por lo del huevo me parecía bastante absurdo y simplemente un juego, pero por los actos que cometí aquella noche era otra cosa, ¿Como se entero? ¿Acaso Addie le ha dicho algo? No creo.
- Vamos confiesa maldito - dijo acorralándome entre la puerta y su cuerpo
- Si, estuve consumiendo droga el sábado pasad ¿y que? - dije desafiándola - tu no eres mi madre para decirme lo que tengo que hacer - dije mirándole a los ojos
Ella estuvo a punto de pegarme otra vez, pero yo le impedí, baje su brazo y después nos rodio un silencio.
Mama había muerto al poco tiempo de tener a mi hermanastro menos, Jimmy, ella murió de sida. En mi familia éramos 8 hermanos, yo era uno de los menores, con quien solo me llevaba con Jimmy y Eliza, quien fue la dueña de aquellas bofetadas. Eliza y yo éramos del mismo padre mientras los otros eran de distintos hombre, se que es grosero hablar mal de los muertos, pero mama se había acostado con muchos hombre en su vida, aun que cuando había encontrado uno estable con quien tuvo a Jimmy ella enfermo y murió. Fue un gran dolor para mi, no solo su muerte, si no por el simple hecho que Eliza se tuvo que hacer cargo de mi, ya que a George no le importaba lo mas mínimo mi presencia.
El era traficante de droga, pero poco me importaba, casi nunca estaba en casa y la verdad no era un gusto tenerlo, cada vez que estaba, obligaba a Eliza a prostituirse y a mi a robar, en si siempre había robado, pero cosas pequeñas, no tan grandes como me obligaba el. Pero en fin, así nos manteníamos, ya que el, y ninguno de mis hermanastro mayores nos querían dar plata así nos manteníamos los 3 y eso iba mas allá de una obligación.
- Prometiste no volver con las drogas, Frank - dijo mas calmada, por el contrario se veía como sus ojos brillaban
- Ya basta ¿si? es mi vida y con ella hago lo que quiera - dije con un tono superado
- ¿No le has robado a George verdad? - dijo preocupada
- No, la compre yo - dije moralmente - y esto es independiente a que tenga un maldito traficante en casa - dije alejándome de ella
- Lose, es fácil de caer en eso cuando esta por todos lados - dijo sacando un cigarro de su bolsillo, por suerte era lo único que fumaba
- No te preocupes, yo se cuidarme solo - dije consolándome
- Tengo que irme a trabajar - dijo zafándose de mi
- Mierda ¿Que horas es? - dije totalmente desconcertado de la noción del tiempo
- Ya es media noche enano - dijo caminando hacia la cocina mientras yo la seguí por atrás
- Mierda, si que dormí mucho - dije tomando una cerveza de la heladera
- Jimmy esta mirando tele, y tu te quedas aquí esta noche ¿si? - asistí con la cabeza - listo me fui a trabajo, estoy llegando tarde - dijo mirando el reloj de la cocina
- Algún día me tienes que presentar a algunos de tus clientes - dije - Como se llama este chico que te simpatiza tanto....
- Gerard - dijo molesta
- ¡Gerard! - exclame - algún día tienes que traerlo a comer a casa, por supuesto yo me encargare de llamar para poder pedir una pizza, no quiero que se nos intoxique con tu comida - dije riendo
- Adiós - y se fue echando un portazo detrás de ella
- Yo también te quiero mucho - dije gritándole sarcásticamente desde el otro lado
Reí unos segundos mas, no estaba seguro, pero a mi hermana le estaba empezando a gustar ese cliente. Había veces en la que no paraba de hablar de el, que sus ojos verdes, que su pelo negro, que su piel blanca. ¡Bah! Yo podría ser cien veces mas lindo que el, además no están angelical como ella dice, el también estaba atrás de las drogas, o por lo menos ese era el comentario que decían algunos, al parecer era medio famoso en los suburbios, y que mi hermana no era la única con quien se acostaba, hasta me lo había nombrado Joey aquella noche cuando me di aquella línea, que según el, se la había comprado a este tipo. No lo conocía personalmente, pero si le hacia algo a mi hermana, el me iba a conocer.
No tenia ganas de escaparme y decirle a Jimmy que me cubriera por unas horas, no estaba cansado pero me sentía desganado, además por ahí Emily venia para casa, aun que rogaba al cielo que no viniera, pero sabia que en cualquier momento aparecería, aunque este castigada se las ingeniaría para escapar y venir a verme.
Me acerque hasta donde estaba Jimmy. Mierda, lo había encontrado con las manos en la masa, estaba mirando una típica película porno. Genial, Yo no me haría cargo de esto, por lo que solo lo deje, a su edad también hacia lo mismo. Suspire y me fui de allí dejándolo solo.
Me acosté en mi cama, quien estaba mojada, pero no iba a sacar el colchón y las frazadas para secarlas, creo que después terminare en gripado y Emily me mataría. Y hablando de roma...
Mire hacia la ventana de afuera, ella se encontraba allí. Mierda no Traía abrigo y estábamos en pleno invierno, poco le importaba
- Pensé que te ibas a olvidar de nuestra charla pendiente - dijo mientras abría las ventanas
Ella entro y se poso en mi cama como lo hacia siempre. Tenia un cigarro en la boca, y tenia un olor infernal a alcohol. Traía toda la ropa desarreglada y algunas marcas en su cuello y un escote por demás en su remera.
- ¿Con cuanto te acostaste desde la ultima vez que nos vimos? - dije acercadme a ella desafiante, pero no enojado
- No se, perdí la cuenta - y se hecho a reír
Como pueden observar lo nuestro no era nada serio, en si no quería nada serio a esa edad, todavía me podía acostar con cualquier chica que quisiera, pero ella era la mas puta de esa barrio, por lo tanto la mas linda. Pero nuestra relación cambio esa tarde de sábado pasado, mi vida dio un giro de 180 grados, y no para mi favor, y era por ese asunto por lo cual venia a hablar.
- Y frankie ¿te decidiste? - dijo tirando la colilla del cigarro al piso y lo apago con su pie mientras prendía otra y me ofreció otra a mi quien se lo acepte - ¿Te vas a hacer cargo del bebe?
- Si, pero aun no confió de que ese bebe sea mío - dije sentándome a su lado
- Vamos Frakie, tu eres el único con quien tengo sexo - ojala le pudiera creer
- Pero no te creeré hasta que tenga los análisis ¿si? - ella asistió
Se acerco a mi y me empezó a besar. Hacia 3 días que no nos veíamos, yo por mi parte me había acostado con otras chicas ese escaso tiempo, pero por como que me crean al parecer ella no se había acostado con nadie, o solo fingía para que le creyera. Antes e tener sexo la detuve para poner seguro a la puerta y encender el grabador con la música de The cure a alto volumen, así mi hermano menor no nos escucharía, aunque sonaba irónico ya que era eso lo que veía.
Fue solo sexo salvaje, tal y como nos gustaba a los dos. A decir verdad, jamás había hecho "el amor" con nadie, y digo con nadie y no con una mujer ya que yo era bisexual, pero nunca tuve la oportunidad de hacerlo con un hombre, ya que habían sido simples besos y nada mas. Tenia miedo de hacerle daño al bebe, pero poco nos importo a los dos, a esa edad no nos importaba nada, aun que ella era muy chica para quedar embarazada con 13 años seguramente no abortaría, mi mama también tuvo a su segundo hijo a su edad y también se hizo cargo. Pero yo era otro tema, aun no sabia bien si ese hijo era mío o de otro con quien se había acostado, por que como vuelvo a repetir nuestro "amor" no era mas que simple sexo desenfrenados todas las noches que podíamos y ella sabia como complacerme.



Nota de autora: Grax por leer, fue un cap medio corto pero no he teniado tiempo. la imagen fue editada por mi, si alguien se ofrece a hacer mejor editacion se los agradeceria, me salio bien feo a mi. Pronto subire nuevo cap. xoxo